Para mi corazón basta tu pecho / 
para tu libertad bastan mis alas. 
Desde mi boca llegará hasta el cielo / 
lo que estaba dormido sobre tu alma …. Este es uno de los versos más famosos del poeta chileno Pablo Neruda.

La poesía es una manifestación de la creatividad, la diversidad en el diálogo, la innovación y la libre circulación de ideas a través de la palabra.

Lo dice la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), entidad que declaró al 21 de marzo como el Día Mundial de la Poesía, fecha que marca un mes para reflexionar sobre las capacidades expresivas de las personas.

Ramiro Caiza, poeta y gestor cultural dio sus impresiones sobre este género literario. “La poesía es como el espíritu para el cuerpo. Es embeberse de esas sensibilidades que, aparentemente, no las vemos pero las llevamos dentro y las sentimos. Creo que la poesía es fundamental para la vida”.

La poesía contribuye a cuestionar permanentemente la forma en que se utilizan las palabras y los modos de interpretar la realidad de forma creativa. Por ello, el trabajo poético debe ser reconocido y protegido, como lo apuntó Caiza.

“La propiedad intelectual debe ayudarle al creador no solo a decir: esta es mi obra. Las leyes y las normas deben garantizar un nivel de ingresos al creador, porque el poeta y el escritor es una profesión como cualquier otra, y el literato necesita vivir de su oficio”.

Patricio Recalde, poeta y músico de blues, resaltó el papel de la poesía como mediadora entre las artes. Él critica los plagios que sufren los difundidores del arte.

“Lamentablemente, las copias, las imitaciones y los plagios han sido una canallada para muchos artistas y gestores culturales, por ello debemos tener claro que como creadores debemos registrar nuestras obras para tener los derechos de propiedad sobre ellas”.

La poesía, con su singular y sublime lenguaje constituye otra faceta posible del diálogo entre los seres humanos.